"Él"
Por: Anna Sánchez
El
otro día durante mis “casi obligadas” horas de ocio “paseando”
por Facebook leí un artículo que decía que para superar un amor
hay que hablar de él, así es que les voy hablar de mi amor, al que
estoy intentando dejar...
Él
es alto, delgado, blanco, tiene la parte superior de su cabeza en
varios tonos de rubio, se dice que es para protección y menos daño.
Siempre va adornado y es irresistible, pero va pasando de persona en
persona, no distingue entre sexo, edad o raza. Él te calma cuando lo
necesitas o al menos eso te hace creer, no le importa destruirte
internamente, acabar con tu corazón o tu cuerpo entero. Sin embargo,
poco a poco se va volviendo una necesidad, con el tiempo se va
asegurando de que no lo puedas dejar, de que lo extrañes cuando no
está, de que lo sientas como parte de ti y de tu personalidad y
también les hace creer a las personas que te rodean que él eres tú
y tú eres él...
Lo
conocí desde que era pequeña, mis primeros acercamientos con él
fue cuando yo tenía como 12 años, estaba en la secundaria y era
“cool” estar con él, poco a poco nos fuimos uniendo más, para
cuando entre a la preparatoria ya era impensable estar sin él,
recuerdo que me escondía en el baño para estar con él sin que mi
papá se enterará, mi mamá lo sabía aunque no le agradaba mucho la
idea. Ambos habían pasado por lo mismo y ella decía que yo tenía
que decidir, que con el tiempo me iba a dar cuenta de que era malo
para mi, hasta el momento eso no había pasado.
Foto: fondosdeescritorio.org |
Pasaron
los años y yo seguía con él, la universidad fue la época más
difícil, pues dormía poco y pasaba más tiempo a su lado, en el
día, la tarde y la noche ahí estaba él, cuando despertaba era mi
acompañante y en las noches de desvelo también, siempre estaba ahí
cuando lo necesitaba, para despertarme, darme ánimos, valor o
simplemente pasar el rato.
Al
terminar la carrera decidí que era tiempo de madurar y hacer esa
visita al doctor que tanto había pospuesto, mis sospechas eran
ciertas, estaba enferma, solo era cuestión de esperar los resultados
esperando porque no fuera cáncer. Él estaba ahí, yo ya no lo
quería, lo odie y lo culpe, yo estaba asi por él.
Los
resultados llegaron y afortunadamente no había cáncer aunque si
quistes. Era necesario dejarlo por salud, lo odiaba pero al mismo
tiempo lo amaba, lo necesitaba... A partir de ese momento comencé
una lucha que hasta la fecha parece interminable, pero ahora si tengo
la ayuda y la decisión que me faltaban,
A
él es a quien estoy intentando sacar de mi vida...
Con
tan solo 8.3 centímetros de alto y menos de uno de ancho es uno de
los vicios mas dañinos, legales y accesibles del mundo, ya que lo
podemos comprar casi en cualquier lado. A diferencia del alcohol que
es medianamente aceptado en la sociedad, el cigarro no te hace actuar
diferente cuando lo consumes, puedes fumar desde uno hasta dos
cajetillas y no pareces “ebrio” o “drogado”, no te vuelve
agresivo y te hace creer que tu vida no corre riesgo, ya que los
efectos son a largo plazo, te hace sentir seguro de que no acabaras
en el hospital con una “sobredosis de humo”.
Siempre
se habla acerca de los problemas de salud que causa como el enfisema
pulmonar, cáncer y la adicción , sin embargo, existen muchos más
efectos de los que se dan a conocer, debido a sus componentes
cancerígenos pueden ayudar a que aparezca o se esparza mas rápido
esta enfermedad, no solo en las vías respiratorias, sino en todo el
cuerpo, los problemas de circulación que ocasiona van desde un
adormecimiento “extraño” hasta perdida de alguna extremidad o
fallas cardiacas o cerebrales, ocasiona problemas reproductivos,
dentales, óseos, de piel e incluso oculares.
Foto: desdeesteladodelaisla.files.wordpress.com |
Casi
6 millones de personas mueren diariamente en el mundo según cifras
de la OMS (Organización Mundial de la Salud), de las cuales más de
66 mil son mexicanos.
Las
cajetillas de cigarros generalmente indican que tienen alrededor de
10 a 12 mg de alquitrán, 7 u 8 mg de nicotina y entre 10 y 12 mg de
monóxido de carbono, sin embargo, también tienen:
Ácido
acético: es la sustancia que da al vinagre el olor y sabor
agrios, por inhalación provoca dolor de garganta, tos y problemas
respiratorios.
Ácido
esteárico:es un ácido graso utilizado en la fabricación de
velas, cosméticos y jabones.
Amoníaco:
compuesto químico de nitrógeno cáustico y peligroso, su inhalación
es corrosiva e irritante.
Arsénico:
metaloide sulfuroso utilizado en los insecticidas
Benceno:
líquido incoloro, inflamable y cancerígeno
Butano:
hidrocarburo, gaseoso, inflamable, su inhalación provoca
somnolencia,
pérdida del conocimiento, sensación de bienestar y alucinaciones
Cianuro
de hidrógeno: líquido incoloro, venenoso y volátil.
Cadmio:
metal tóxico utilizado en pilas, ayuda al desarrollo del cáncer.
Cloruro
de Vinilo: gas incoloro e inestable, provoca alteraciones óseas,
de hígado, además de afectar las células sanguíneas.
Estireno:
cancerígeno, provoca problemas nerviosos, de concentración y
equilibrio.
Formaldehído:
inflamable y volátil, provoca cáncer nasofaríngeo.
Fenol:
utilizado como antiséptico, cauterizador, pero también para la
preparación de explosivos.
Metano:
gas incoloro que provoca asfixia,
inconsciencia, ataque cardíaco o lesiones cerebrales.
Metanol:
gas
incoloro,
inflamable
y
tóxico,
se emplea como anticongelante,
disolvente
y
combustible.
Monóxido
de carbono:
gas
inodoro,
incoloro y altamente tóxico,
puede
causar la muerte
cuando
se respira en niveles elevados.
Polonio:
metaloide altamente tóxico y radioactivo.
Acetona:
líquido incoloro, inflamable, provoca salivación,
confusión mental, tos, vértigo, somnolencia, dolor de cabeza, dolor
de garganta y hasta pérdida del conocimiento
Es increíble que algo tan pequeño y aparentemente sencillo y frágil, pueda hacer tanto daño, y que haga que parezca imposible dejarlo, felicitaciones por esa enorme decisión
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